Hoy es una fecha muy especial para las mujeres y hombres profesionales del humor gráfico, pues tal día, como hoy, 17 de enero, nacieron dos grandes viñetistas que además de fecha de nacimiento compartían nombre: Antonio Fraguas “Forges” y Antonio Mingote “Mingote”.
Forges y Mingote, con estilos muy diferentes, ocuparon las tiras de periódicos durante mucho tiempo, además de ejercer también de escritores, directores de cine y colaboradores radiofónicos.
Es realmente curioso que ambos nacieran el 17 de enero, Forges en 1.942 y Mingote en 1919, quien compartió año de nacimiento, que no día, con el también genial humorista gráfico Gila, que por cierto fue gran amigo de ambos. Mingote, además, en los primeros tiempos le acogió en su piso de Madrid, algo muy curioso, pues cada uno había luchado en bandos diferentes durante la Guerra Civil Española. Ya se sabe, los genios de verdad se quieren y admiran mutuamente.
Los inicios de Forges y Mingote fueron bastante diferentes.
Antonio Fraguas, Forges, fue un genio más de los que fracasó en la escuela, pues los profesores rígidos del sistema no supieron valorar su talento, y lo calificaron de “mal estudiante”. En 1956 a sus catorce años comenzó a trabajar como técnico de telecine en Televisión Española y como mezclador de imagen desde 1962. Abandonó la plantilla de TVE siendo coordinador de Estudio en 1973 para dedicarse profesionalmente al humor gráfico y desde entonces no paró de retratar la sociedad española de su época como nadie, con personajes tan conocidos como Blasillo o Concha. Como señalaba Rubén Amón en el artículo “El humor como terapia y compasión”:
Es de señalar la originalidad de Forges, su personalidad, su audacia, su compromiso social, su ternura, su constancia y su humanismo, incluso la solidaridad con el contribuyente, el funcionario, el náufrago, el cuñado, reflejo de un bestiario que el humorista ha custodiado con cariño, empatía y respeto.
Ese “mal estudiante” se acabó convirtiendo en “doctor honoris causa” por la Universidad de Alcalá de Henares, y de su discurso de investidura en el que se acordó de Mingote y de Gila, apuntamos:
El humor es un bálsamo indudable para ese viaje sin retorno, siempre doloroso, que es para los humanos la vida.
Forges fue el “reflejo satírico de todo un país”, y también el hombre afable y cercano que desprendía la humildad de los verdaderos genios, que ayudaba a quien podía y que además, trabajó por los derechos de la profesión.
Podríamos recoger multitud de frases suyas, pero creo que hay una que define muy bien la profesión de viñetista:
Los humoristas muchas veces tenemos que hacer pensar y muchas veces tenemos que hacer llorar.
Antonio Mingote como era de familia de requetés, se alistó con las tropas de Franco. “Era lo que tocaba”, ha explicado en alguna ocasión su hijo Carlos. Se convirtió en militar de carrera, sin duda el más pacifista de sus compañeros, que dejó la milicia por el humor.
Mingote, y así lo han señalado diferentes personajes que lo conocieron, no era ni de derechas ni de izquierdas y como relata Ángel S. Harguindey en su artículo sobre Mingote “Un gran tipo”:
Fue un hombre lúcido y sensato al que le enfadaba profundamente la estupidez y el fanatismo. El resto de las torpezas humanas (las aglomeraciones urbanas, la destrucción de la naturaleza, la absurda burocracia, etcétera) las trataba con más comprensión y, siempre, con ternura. Él mismo se definía como “yo no soy anti nada. Como dice Senillosa, yo no soy ni antituberculoso”.
Mingote no fue de los que manejara sus pinceles al son de nadie. Libre e impertinente con el poder, llegó incluso a estar incurso en un proceso judicial acusado de “ultraje a la nación” por uno de sus chistes, donde, a cuenta de los innumerables fraudes fiscales que salían a relucir en la prensa cada día, ponía en tela de juicio que España fuera “la reserva espiritual de Occidente”.
Desde luego no nos deja indiferentes el epitafio elegido por este gran humorista gráfico, que publicó más de 25.000 dibujos, guiones y decorados televisivos:
Perdonadme. No lo volveré a hacer.
Forges y Mingote, ambos iconos de la prensa española, nacieron un 17 de enero y desde la Asociación Frente Viñetista, nos parece que esta fecha se puede convertir en el “Día del viñetista”.
A partir de hoy, aprobado en asamblea por unanimidad, que desde la Asociación Frente Viñetista promoveremos esta fecha como un día para honrar la gran labor que realizan las mujeres y hombres profesionales del humor gráfico en la sociedad, al ser capaces de sintetizar en una viñeta, la noticia, la historia o reflejar la sociedad de forma artística, periodística y transgresora, con los toques de humor, sátira e ironía, como solo sus mentes son capaces de llevar a cabo.
Porque el humor es un bien de primera necesidad. ¡Viva el humor gráfico, viva la viñeta!
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elpais.com El humor como terapia y compasión 24-02-2018
Forges no hacía viñetas, sino radiografías de sus congéneres con una mirada humanista.
elpais.com Un gran tipo
Antonio Mingote no era ni de derechas ni de izquierdas, era un hombre lúcido y sensato al que le enfadaba profundamente la estupidez y el fanatismo.
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L@s Humoristas Gráfic@s de España recuerdan a Forges en la exposición colectiva “Homenaje a Forges“, rindiendo homenaje con más de 50 viñetas al gran humorista gráfico.
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El comunicado está firmado, en nombre del Instituto, por Forges como Director Técnico, además de por el Director Académico Tomás Gallego y el Secretario del mismo, Juan García.
la-politica.com Forges: “Los humoristas muchas veces tenemos que hacer pensar y muchas veces tenemos que hacer llorar.” 17-01-2019
la-politica.com #SiempreForges 22-02-2019
elespanol.com Antonio Mingote, el hombre que dio a las viñetas rango de columnas 3-04-2012
Wikipedia Forges
Wikipedia Mingote
